esperar

Qué feo es esperar.
Esperar en el dentista, aunque te den un turno a las tres de la tarde seguramente no sepas cuándo te van a sacar la muela hasta que te atienda. Y no va a ser a las tres de la tarde. Y solamente te tenés que sentar ahí a esperar, esperar que no te duela tanto, sabiendo que sí te va a doler.
Esperar estudios para saber qué tenés, para tener una respuesta a esos malestares.
Esperar a alguien. Esperar cosas que no sabés apenas si van a pasar. Esperar cosas que te morís por que pasen. Esperar y perderte otras cosas. Esperar. Esperar. Y esperar. Para decepcionarte.
Para que duela nada más. Aún sabiendo que lo mejor es no esperar nada, sabiendo que mucho de lo que imaginas no va a pasar, sabiendo que esperar es morir un poquito con cada día que pasa. Sabiendo que es mejor salir a buscar las cosas, pero qué lástima porque no queda en vos. Esperar que al final no tengas por qué perder algo que tanto amás, sabiendo que podés volver a amar, pero esperar que no tengas por qué volver a amar a alguien más.
Seguramente sea esperar lo que nos vuelve locos.